¿Cómo evitar que tus pinchos madera se quemen en la parrilla?
Las brochetas son una preparación deliciosa de las parrilladas, pero, en ocasiones pueden arruinarse o estropearse porque los palitos de bambú o madera se queman un poco al contacto con el fuego. En Festival tenemos los palos y pinchos más resistentes para tus asados, sin embargo, en ocasiones estos accidentes suceden de manera inesperada y por eso, queremos compartirte esta solución que te ayudará a evitar sabores y olores a quemado desagradables
La forma más sencilla para que evites que tus pinchos de madera se quemen en el fuego de la parrilla, es dejarlos en remojo 30 minutos antes de usarlos. Para esto, usa un recipiente hondo con una cantidad de agua que pueda cubrir los pinchos, sumerge los palitos que vayas a usar y si no logran hundirse y quedan flotando, utiliza algo más pesado encima para forzarlos a que queden adentro.
Luego de dejarlos este tiempo en remojo, retíralos del agua y sécalos con un paño de cocina, para que puedas armar las brochetas, esto no los secará internamente, pues es allí donde se concentrará toda el agua y así evitará que la temperatura del fuego los queme. Además, este truco también es útil para que la carne no se quede pegada a los palitos y sea más fácil de comer.
Otro truco básico, pero, que debes tener muy en cuenta a la hora de preparar brochetas, es introducir los pedazos de carne, vegetales o los ingredientes que les vayas a agregar muy unidos sin dejar espacios entre sí, cubriendo muy bien el palo y dejando espacio para el mango que permita agarrarlas fácilmente. Es importante que la parte del pincho que quedó descubierto no esté directamente sobre las brasas, quedando casi por fuera de la parrilla o también puedes protegerla con papel aluminio para evitar que se queme.
Recuerda que siempre es importante evitar poner las brochetas o cualquier alimento sobre la parrilla, cuando esté en llamas, no solo evitarás que se queme la brocheta, también la carne y otros alimentos que pueden quedar hechos carbón rápidamente sin cocinarse por dentro. Por esto, es importante asar cuando las brasas estén generando un calor elevado, pero no botando fuego fuerte y de manera descontrolada.
